EL PLACER DE LEER
Uno de los recuerdos más claros que tengo de mi niñez es el de ver a mi mamá leyendo. En los momentos de descanso (en las noches, los fines de semana, etc) siempre estaba leyendo algo: el periódico, que era (y sigue siendo) casi una ceremonia, revistas femeninas tipo Buenhogar o Vanidades, y por supuesto cualquier cantidad de libros. Escritores latinoamericanos, rusos, norteamericanos; novelas románticas, poesía, historia, biografías; clásicos, contemporáneos...Casi cualquier cosa con letras. Creo que lo que le faltó fue ponerse a leer la guía telefónica, como Dustin Hoffman en Rain Man...
Muchas veces, mientras mis amigas recibían como regalo ropa o prendas o barbies, mi mamá nos regalaba libros. Y claro, uno a esa edad pensaba "hubiera preferido la casa de la barbie pero bueh..."
Total que de una forma u otra, sea por imitación, sea porque en ese tiempo no había cable y a veces no había mucho que ver en la tele, sea porque todos los panas se fueron pa la fiesta y a uno no le dieron permiso...lo cierto es que fui adquiriendo también ese hábito.
Hoy en día tengo casi la misma manía. Cuando voy a un sitio donde sé que debo esperar me llevo un libro, una revista, un folleto, cualquier cosa; cuando voy a la playa (es delicioso recostarse a leer en la playita!!!), cuando estoy sola en mi casa, un ratico antes de dormir...incluso cuando voy a almorzar sola me llevo una revista para leer (y en ese momento oigo la voz de mi mamá: "no leas mientras comes que eso es malo")...
Y como la vida es un ciclo, y los chamos siempre copian lo que los padres hacemos, y los padres repetimos lo que hicieron nuestros padres, mi hija va por el mismo camino. Siempre anda con un libro. A veces leemos el mismo tantas veces que nos lo sabemos de memoria, pero lo disfrutamos de todas formas. Y yo, al igual que mi mamá, a veces le regalo libros en vez de juguetes y me la imagino pensando "hubiera preferido un juego de gameboy pero bueh..."
Y cuando ya en la noche voy a su cuarto a arroparla y a darle las buenas noches y ella me pide "mami léeme un cuento" no puedo evitar pensar que si bien mis padres no nos van a heredar propiedades, capitales o pomposos apellidos, este lazo especial que nos une a través de la lectura y que se está extendiendo ya hacia la tercera generación es el mejor regalo, la mejor herencia que nos pueden dejar porque definitivamente a través del amor por los libros nos están regalando el mundo.
Muchas veces, mientras mis amigas recibían como regalo ropa o prendas o barbies, mi mamá nos regalaba libros. Y claro, uno a esa edad pensaba "hubiera preferido la casa de la barbie pero bueh..."
Total que de una forma u otra, sea por imitación, sea porque en ese tiempo no había cable y a veces no había mucho que ver en la tele, sea porque todos los panas se fueron pa la fiesta y a uno no le dieron permiso...lo cierto es que fui adquiriendo también ese hábito.
Hoy en día tengo casi la misma manía. Cuando voy a un sitio donde sé que debo esperar me llevo un libro, una revista, un folleto, cualquier cosa; cuando voy a la playa (es delicioso recostarse a leer en la playita!!!), cuando estoy sola en mi casa, un ratico antes de dormir...incluso cuando voy a almorzar sola me llevo una revista para leer (y en ese momento oigo la voz de mi mamá: "no leas mientras comes que eso es malo")...
Y como la vida es un ciclo, y los chamos siempre copian lo que los padres hacemos, y los padres repetimos lo que hicieron nuestros padres, mi hija va por el mismo camino. Siempre anda con un libro. A veces leemos el mismo tantas veces que nos lo sabemos de memoria, pero lo disfrutamos de todas formas. Y yo, al igual que mi mamá, a veces le regalo libros en vez de juguetes y me la imagino pensando "hubiera preferido un juego de gameboy pero bueh..."
Y cuando ya en la noche voy a su cuarto a arroparla y a darle las buenas noches y ella me pide "mami léeme un cuento" no puedo evitar pensar que si bien mis padres no nos van a heredar propiedades, capitales o pomposos apellidos, este lazo especial que nos une a través de la lectura y que se está extendiendo ya hacia la tercera generación es el mejor regalo, la mejor herencia que nos pueden dejar porque definitivamente a través del amor por los libros nos están regalando el mundo.
3 Comments:
maléfica: Gracias por visitarme! El entorno lo es todo, creo yo. Así como se repiten los buenos hábitos, los malos también. Lo de predicar con el ejemplo es muy, muy cierto.
By Dímelo, at octubre 07, 2005 3:13 p. m.
Pues tengo que confesar que tengo los mismos recuerdos de nuestra host (no sé porque será...)
Y si de chiquita también más de una vez pensé: Pero yo quería la casa de la Barbie!!! cuando me regalaban libros...ahora cuando mis amigas se van de rebajas a tiendas como Zara y Bershka, yo, aparte de hacer mis compritas con ella paso fijo por mi librería preferida aquí...
De hecho la ultima vez que me mudé la caja más pesada de toda la mudanza era la de los libros...
Además aquí en la madre patria, hay un montón de editoriales que sacan promociones de colecciones de libros...por ejemplo ahora hay una de grandes escritores de la historia...empezaron un un volumen de unas 800 páginas con obras de Pablo Neruda, por sólo 2 euros!!!
Y yo que voy caminandito de lo más inocente por la calle y veo eso en el quiosco...cómo puedo no comprarlo!!!
Claro que ese es el precio promocional del primer tomo de la colección...los demás pues ya cuestan de 12 euros en adelante y ya ahí pues me lo pienso...
Total, que después de 2 años tengo como 5 colecciones por la mitad...dos de novelas policíacas, una de grandes escritores de la historia, una de novelas históricas y otra de libros de filosofía...de los cuales me he leido si acaso la mitad de todos esos libros...
Pero bueno, cuando pienso que ya viene el invierno, me reconforto, porque sé que tendré un montón de material para pasar horas en mi casita calentita...
By Anónimo, at octubre 13, 2005 10:27 a. m.
Familia que lee unida, permanece unida ;-) El resto lo dijo mi esposa...
By Anónimo, at octubre 13, 2005 6:59 p. m.
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