Vientos de cambio...
Para que tengan más o menos una idea: mis funciones exigen disponibilidad las 24 horas, los siete días de la semana, todo el año (excepto vacaciones, supuestamente) y tengo casi 5 años haciendo lo mismo con un sueldo que es...como decirlo...ehhhmmm...bueno, una mierda. No hay otra descripción. Es decir que esa curva de aprendizaje y motivación con la que uno arranca en toda actividad o trabajo nuevo, hace rato que se convirtió en una recta más que monótona (en realidad la de motivación iba palo abajo pero bueh...)
Hace tiempo que andaba pidiendo, casi suplicando, un cambio. Ya ni siquiera para un cargo mejor, al menos para algo diferente.
Y resulta que, como dice mi mamá, Dios escribe derecho sobre líneas torcidas porque la Gerencia para la cual siempre había querido trabajar absorbió el área en la que estaba y la transferencia que estuve buscando ahora es más fácil porque es dentro de la misma Gerencia y no dependo de aprobaciones de terceros ni de disponibilidad de vacantes ni ninguna de esas trabas burocráticas :-D
Así pues que voy a tener nuevas funciones, voy a poder apagar mi teléfono después de salir de la oficina y sobre todo voy a poder disfrutar de fines de semana tranquilos con el Esposito y La Princesa sin que me estén llamando a cada rato por alguna emergencia.
Por los momentos debo compartir mi tiempo entre ambos cargos porque no puedo dejar guindando el área en la que estaba (aún no tienen mi reemplazo) pero por lo menos ya siento nuevamente ese gustico que da saber que voy a aprender cosas nuevas y que voy a tener nuevos retos y nuevas experiencias. Realmente extrañaba esta sensación, es terrible despertarse en la mañana y pensar "qué ladilla tener que pararme para hacer ese trabajo del coño...".
Quiero guardar la celebración oficial para cuando entregue totalmente las viejas funciones, pero estoy tan felíz con esta oportunidad que quise compartirla con ustedes.
Soplan vientos de cambio y sé que son para mejor!!!